Cada día salen noticias sobre las funciones de
personas que cuidan de las personas mayores, o personas que están en una
situación de salud que dependen de otras para las actividades de vida diaria, a
veces necesitan la ayuda de forma temporal mientras se recuperan o de por vida.
Así que se necesitan de cuidadoras, digo cuidadoras porque aún en la mayoría de
los casos son mujeres quienes prestan estos servicios. Actualmente el
envejecimiento de la población ha puesto en el centro la necesidad de personal
para cuidar a los mayores en el domicilio.
Las funciones de las personas cuidadoras son
amplias y variadas ya que se tiene que adecuar a diferentes situaciones.
Primero. La persona cuidadora debe conocer al
paciente, las patologías que presente, las necesidades de ayuda para una o
todas las actividades de vida diaria. Las personas mayores no solo necesitan
quien les ayude para las actividades básicas de vida diaria, sino también quién
las escuche y no las juzgue, por ello la relación que se va dando entre la
persona mayores y sus cuidadores se hace estrecha y de complicidad. Así es como
en el día a día se van conociendo y generando una relación estrecha.
Segundo. El entorno del domicilio en la gran
mayoría de las ocasiones es complicado, las viviendas no están adecuadas para
atender a las personas mayores, generalmente están con muchas barreras arquitectónicas
desde escalones, falta de barandales, soportes en el baño, pisos lisos,
espacios reducidos. exceso de muebles que complican los traslados y
dificultando aún más el cuidado.
Tercero. La persona cuidadora también tiene que
adecuarse a la familia. A veces el mayor obstáculo son las familias. Trato
inadecuado a la cuidadora, no dar las herramientas necesarias para realizar el
trabajo. Por ejemplo, falta de ropa limpia para cambiar a la persona, falta de
ropa limpia para hacer cambios de sábanas, falta de cepillos de dientes para la
higiene bucal, por mencionar algunas.