Lourdes Rivera, directora general de Amavir, participó el 30 de noviembre en calidad de vicepresidenta de AESTE en la jornada «El futuro de los cuidados», organizada por la Asociación de Residencias de la Tercera Edad de Castilla-La Mancha (ARTECAM). El acto, que tuvo lugar en el Hotel Beatriz Toledo Auditorium, fue inaugurado por Ana Saavedra Revenga, viceconsejera de Promoción de la Autonomía y Atención a la Dependencia de la Consejería de Bienestar Social de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.
Durante el acto, se recordó la importancia de marcar la hoja de ruta de hacia dónde debe caminar esa necesaria y reclamada «revolución de los cuidados» de las personas mayores o las personas en situación de dependencia. Rivera señaló que «estamos en un momento de cambio para el sector y es muy importante que todos los que trabajamos por y para las personas mayores y dependientes reflexionemos sobre estos asuntos y compartamos con las administraciones públicas nuestra visión».
En su intervención, recordó las distintas iniciativas que se están poniendo encima de la mesa por parte de los gobiernos nacional y autonómicos para avanzar hacia un cambio de modelo de las residencias, como la limitación del número de plazas, la atención centrada en la persona o el aumento de ratios de personal. Rivera apuntó que todos en el sector pueden compartir estas medidas, pero quiso incidir en que «este cambio de modelo radical no puede hacerse de la noche a la mañana y, sobre todo, sin que antes hagamos una profunda reflexión acerca de cómo garantizar que sea aplicable y sostenible económicamente, por lo que es necesario que cada propuesta de reforma venga acompañada de una memoria económica». Puso el ejemplo de la dificultad de rentabilizar residencias con menos de cien plazas y urgió también a las administraciones a revisar las tarifas que pagan por las plazas concertadas, porque las exigencias son cada vez mayores pero esas tarifas siguen siendo insuficientes.
En su opinión, no hay que olvidar además que, durante la pandemia, las residencias «lo hemos hecho lo mejor que hemos podido, nos hemos dejado todos la piel y, aunque seguro que habremos cometido fallos, lo que se ha demostrado es que quizá uno de los errores principales no ha sido el tamaño de los centros sino la escasa coordinación sociosanitaria, lo que nos lleva a seguir exigiendo que esta coordinación sea afectiva, así como una solución urgente a los graves problemas que tenemos para encontrar personal sanitario, que nos afecta a nosotros pero también a la sanidad».
Rivera recordó, en cualquier caso, que la reflexión sobre el cambio de modelo ha de hacerse contando con la opinión de la iniciativa privada, que es la que «está empujando para que España pueda llegar a cumplir los ratios de plazas de la OMS». Y, según su opinión, «lamentablemente nos encontramos ahora mismo en un momento de total incertidumbre. No sabemos cómo construir los nuevos centros, qué costes vamos a tener, qué modelo vamos a tener que seguir».
En la jornada también participaron otros representantes del sector, como la presidenta del Círculo Empresarial de Atención a Personas (CEAPs), Cinta Pascual; el presidente de ARTECAM, Francisco José Núñez Alía y Julio Zabala, de la Confederación Española de Organizaciones de Mayores (CEOMA).
Por último y como cierre, las conclusiones estuvieron a cargo de la directora general de Mayores de la Consejería de Bienestar Social de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, Alba Rodríguez Caballero y de la vicepresidenta de ARTECAM, Paloma González Gallego.